martes, 29 de mayo de 2012

¿Y qué talla soy yo?


Salir de compras a veces puede resultar una auténtica pesadilla; y es que ya no sé que talla realmente soy. Si soy un 8 o un 38, si entro en la M o en la L. La tensión aumenta cuando se pasa al probador y nada de lo que escoges es de tu talla correcta.

Comprar por internet siempre es una odisea, lo dejo al azar y me llevo gratos o desagradables sorpresas, eso si no hay compra en la que no devuelva o cambie algo.


Este problema de la diversidad de tallas no solo es un asunto que me preocupe a mi, sino también a miles de personas en el planeta. Preocupa a la Organización Mundial de la Salud, a los diseñadores y  al parecer la Unión Europea ha decidido proponer la unificación de las tallas.

El hecho de que las tiendas cambien el patrón de las tallas genera inseguridades en las mujeres, hasta tal punto que una desilusión en un probador de una tienda de ropa puede desencadenar en enfermedades como la bulimia o la anorexia.

La confianza y el autoestima de la mujer en muchos casos, aun más en temprana edad, dependerá de la forma en cómo se ve ella a si misma y como le ven los demás. Esto sumado a la presión mediática hace que los estándares de belleza imponga la talla misma, donde el prototipo de mujer ideal debe entrar en un talla 6 , 36 o 0.

Los fabricantes de ropa han utilizado el tema de las tallas como una más de sus estrategias comerciales, aprovechándose del vacío legal existente hasta el momento en este tema, tanto a nivel nacional como europeo. Con ello, no sólo se están vulnerando los derechos del consumidor a recibir una información homogénea, fidedigna y de utilidad en el etiquetado de la ropa que compramos o que nos probamos, sino que se están promoviendo cánones de imagen y de belleza relacionados con la delgadez (“caber” en ésta u otra talla) que ponen en serio peligro la salud física y mental de las personas.

Como si fuera poco, algunas de las tiendas con “tallas unificadas” no cumplen con los estándares de medidas. Me he tomado la molestia de comparar en 3 tiendas unos pantalones talla 38 y en una de ellos no he entrado, en otro he entrado con dificultad y en el ultimo me sobra; por tanto la pregunta es: ¿seré yo? Con metro en mano compruebo que entre pantalón y pantalón existe al menos 6 cms de diferencia.



la Federación Española de Asociaciones de Ayuda y Lucha contra la Anorexia y la Bulimia (FEACAB) y la Fundación Imagen y Autoestima han alertado de nuevo sobre los peligros de la falta de unificación en las tallas y su impacto en la salud de las personas. La denuncia es unificada entre los consumidores que ante el desolador panorama muchas veces se obligan a realizar dietas extremas para volver a entrar en la talla que solían usar.

Hace algunos años el  Ministerio de Sanidad y Consumo Español, a la cabeza entonces de Elena Salgado, llegó a un acuerdo con las empresas más grandes del sector textil, tales como Inditex, Mango, El Corte Ingles o Cortefiel. El acuerdo consistía en unificar las tallas de acuerdo a unas medidas proporcionadas por el propio Ministerio, que además tendría en cuenta la morfología de la mujer española. El acuerdo tenía en principio una duración de 5 años, pero después de muchos estudios y encuestas a fecha de hoy ninguno de las empresas anteriormente señaladas ha cumplido con el mismo.

El aumento desmesurado de mujeres afectadas por desordenes alimenticios en la Comunidad Europea ha hecho que finalmente el Parlamento Europeo se pronuncie al respecto proponiendo un reglamento en el que se pretende obligar a los fabricantes de textil a etiquetar de forma más escrupulosa el origen del producto y a la vez que se instaure un sistema unificado de tallas tanto en ropa como en calzado. Sin embargo a día de hoy dicho reglamento no se encuentra aprobado y el problema persiste.

Los rumores sobre el tan sonado y necesitado reglamento dicen que se publicará en 2015, pero insisto son solo rumores.

¿Y mientras tanto qué? Antes que ir de acuerdo a lo que marcan las tendencias, la chica de moda o lo que la gente en general marca como concepto de mujer bella, debemos hacer un análisis interno y estar en paz con nosotras mismas, no hay bella más bella que la que es natural y saludable.

Así que dejar de preocuparos por la talla. Ya sabemos que no es que hayamos engordado o adelgazado por arte de magia. El cambio de talla no deja de ser una estrategia comercial para incentivar la marca  o mover el mercado.

 "Be healthy and f*+k everyone"



1 comentario:

  1. Hola guapísima! Dicho y hecho ;). Me ha gustado leer tu blog.

    La verdad es que el tema de las tallas es un lío y genera bastante confusión, incluso a veces frustración, entre las consumidoras.

    Lo dicho, ahora que te conozco me pasaré de vez en cuando a ver qué nos cuentas :).

    Un besito muy fuerte desde www.fashionaria.es

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