En un café antiguo y acogedor de mi zona madrileña favorita “Chueca” me encuentro con Lina Osorio, diseñadora Colombiana, luchadora, talentosa y opita. Si, opita como yo y es que este mundo no puede ser más pequeño.
Mientras compartimos un cortado me cuenta de sus aspiraciones y metas, porque Lina convierte sus sueños rápidamente en metas y las sigue hasta que las consigue.
Esta diseñadora estudió en la escuela de diseño Arturo Tejada en Bogotá (Colombia). Rápidamente sus creaciones se volvieron famosas en las diferentes compañías de teatro y sus diseños colmaron los anuncios de la televisión colombiana.
Es espiritual y muy artística, su visión del mundo de la moda va más allá de couture o el pret a porter; su máxima aspiración es formar parte del equipo de diseño y creación de trajes del Circo del Sol y creo que con esto lo explico todo. El teatro y la música lo lleva en la sangre y son fundamentales para hacer funcionar esta máquina de inspiración y creación.
Después de alcanzar el éxito en Colombia, Lina ve que su carrera no está completa y necesita dar un paso más para alcanzar su objetivo como diseñadora y ha viajado a Madrid para hacer un Máster en complementos en el prestigioso “Istituto Europeo Di Design”.
Se deja seducir por la magia de los tocados, ese elegante complemento que en Colombia está aun por descubrir. El tocado ha estado presente como elemento decorativo del hombre a lo largo de la historia, faraones, dioses griegos, emperadores romanos e indígenas han adornado su cabeza con diferentes telas, texturas y plumas.
El tocado tiene una historia larga e interesante con gran connotación religiosa. En la Edad Media se usó para cubrir la cabeza en símbolo de pudor, la misma María Antonieta fue una gran aficionada agregándole cintas y encajes. Los años felices del tocado son los 20 y 30 del siglo XX gracias a CHANEL y su amplia colección de sombreros y tocados .
En los años 40 y 50 del citado siglo se generaliza la utilización de tocados como complemento de conjuntos femeninos de cinturas muy marcadas; es la era Dior. Además, el motivo de la rápida expansión se debe a la difusión que el cine hacía de sus estrellas: Audrey Hepburn, Rita Hayworth, Grace Nelly entre otras. En los años 60 no podemos olvidarnos de la carismática Jackeline Kennedy, quien hizo del sombrerito pill-box un símbolo de elegancia.
En estos tiempos asociamos el tocado a ocasiones especiales, bodas, comuniones etc.. también encontramos tocados para vernos bellas en el día a día o en una noche especial; un complemento chic ideal.
Lina va paso a paso conquistando esta dura jungla de la moda, sus creaciones se encuentran en algunas tiendas madrileñas y planea dar a conocer su trabajo a través de internet y redes sociales. Le gustaría formar parte de alguna firma grande, pero insiste en que ella quiere ser grande.
Yo me quedo encantada de su suavidad, de su empuje y la forma en la que cree en su arte, de su amor y admiración por su trabajo y es que cada diseño es como un hijo, tiene algo especial y lleva su esencia.
Para esta temporada nuestra experta Lina Osorio recomienda los colores pasteles, el nude en su mayor expresión al estilo Sarah Jesica Parker.
Yo agradezco inmensamente su tiempo y que me dejara conocerla un poco más de cerca. Admiro profundamente el talento latino que viene abriéndose espacio en Europa a costa de trabajo, constancia y talento, mucho talento que es el que corre en nuestra sangre colombiana.
Os dejo algunas de las creaciones de Lina, si quieres saber más de ella puedes seguirla en twitter como @linaosorio3 y un pequeño test que quiero que sea constante en todos mis encuentros con expertos de la moda.
Diseñador: Vivianne Westwood
Color: Burdeos
Textura: Algodón
Prenda: Pantalón
Accesorio: Tocado
Lugar: Paris
Cantante/Grupo: Angus & Julia Stone
Olor: Incienso
Bebida: Chai Tea
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