Mientras disfruto de mi matutino café de Starbucks, una de mis obsesiones (me gusta con leche desnatada y vainilla -sin azúcar-), y escucho “Never Let me Go” de Florence + the Machine, otra de mis obsesiones de las que seguramente les hablaré en alguna otra ocasión, pienso que no puedo dejar pasar el cumpleaños de uno de los causantes de este giro en mi vida y de mi pasión sobre la moda.
El pasado lunes 9 de Abril el rey del mundo de la moda cumplió 49 años, casi medio siglo de lucidez, inteligencia e imaginación.
El más grande de entre los grandes y una de las personas que más admiro de este negocio. Este Newyorkino tiene mi corazón desde hace ya algún tiempo, pero cada día me sorprende más con su excentricidad revuelta con altas dosis de elegancia.
Les hablo de Marc Jacobs, ese niño prodigio de la moda (hoy no tan niño) al que todos quieren imitar, que con 20 años y cero presupuesto ganó el premio más importante al que puede aspirar un diseñador novel, el Perri Elvis Award of New Talent del Consejo Americano de Diseñadores.
El talento de Marc nunca ha pasado desapercibido. A pesar de las dificultades económicas encontró quien apostara por su trabajo y es que era tan bueno que sucumbió ante él hasta la temida reina de la crítica fashionista Anna Wintour, ayudándole a conseguir de las manos del mismo Donald Trump el salón de baile del famoso hotel plaza de New York para que Marc pudiera lanzar su primera colección, precio que era para él imposible de afrontar.
Y es que cuando se tiene la energía y el talento de este genio el éxito está asegurado. Para aquel show en el Plaza, el lanzamiento de su primera colección en solitario, Marc contó con la presencia en la pasarela de la diosa de ébano, Naomi Campbell, que por aquel entonces era lo más cotizado de las pasarelas (1994) y sin que cobrara un solo dólar como manifestación de su admiración y apoyo al diseñador.
En 1995 Marc fue nombrado director artístico de la casa Louis Vuitton, creando la primera línea redy-to-wear apostando por modernizar su estilo, lo que para muchos de los llamados expertos resultaba una decisión desafortunada y descabellada. Sin embargo desde que Marc tomó las riendas de Luis Vuitton las ganancias se han incrementado en un 70%.
Modelos de carteras como el de los grafitis y las cerezas han revolucionado el emblemático bolso y las nuevas colecciones de zapatos son exquisitas. Son también alucinantes sus diferentes colaboraciones con artistas de la talla de Stephen Sprouse o el japonés Takashi Murakami.
Marc según la revista Times es una de las 100 personas más influyentes del mundo y es que rompe todos los esquemas; está convencido de que los hombre llevan mejor la falda que las mujeres y su vida íntima es casi igual de popular que sus carteras.
Yo le veo como una moneda de oro, la cual tiene dos caras: una que despliega glamour y elegancia, perfecta y refinada, la princesa de las fiestas que pone a los asiáticos al borde de un ataque la cuál es su faceta en Louis Vuitton. Su última aparición en la semana de la moda parisina permitía a la imaginación abordar el tren de los sueños, su colección era un dulce caramelo llena de color y recuerdos de los inicios de la firma, un viaje al pasado, o mejor dicho, un viaje al futuro, al mundo de los sueños, esos que a muchas y afortunadas demandantes de la firma pueden cumplir. En definitiva una colección para volar.
La otra cara de la moneda es la de Marc by Marc Jacobs, su propia firma, en la que nos deja ver su visión más intima de la moda donde no importa el glamour, sino la comodidad y el confort, donde Marc es joven y activo. Podemos disfrutarlo en bolsos, ropa, perfumes y dentro de muy poco en maquillaje, ya que lanzará una colección para Sephora, la cual promete ser única y exclusiva, y por suerte al alcance de los mortales.
Los front road de los desfiles de Marc son una combinación entre alfombra roja y año nuevo en Times Square. Las celebrities se pelean por estar en sus desfiles y el despliegue de medios es incalculable. Todos quieren ver a Marc, saber qué piensa, porque a través de sus ojos se podrá intuir qué viene para este variante mundo de la moda.
Su lucha contra la prevención del VIH es también reconocida, gran parte de los beneficios de sus creaciones van destinados a diferentes organizaciones que ayudan a enfermos de sida, a la investigación sobre el virus y aquellas que promueven la prevención.
Hoy dedico este post a este revolucionario, me gusta la gente auténtica y trabajadora, a donde quiera que va da de qué hablar. Lleva 20 años siendo un icono de este negocio y promete estar algún tiempo más.
De su inspiración les dejo lo mejor para esta temporada según mi criterio.
Feliz Cumpleaños Marc Jacobs!!!!!!!!!!!!
Esta genial!!! Me encanta tu estilo!! no puedo esperar por el siguiente!!!
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